Desde cabañas en los árboles a las profundidades marinas, Quebec sorprende con sus alojamientos, que se salen de lo ordinario. Dormir en la copa de un árbol o con los lobos. O en un tipi, una yurta, un faro, una casa de hobbies inspirada en El Señor de los Anillos… Los más audaces escogerán un iglú, o directamente el Hotel de hielo!