Es bien sabido que aquí las ciudades están llenas de vida. Recorremos los barrios despiertos como si estuviéramos en un libro abierto. Historia, arquitectura y fiestas forman un patrimonio cultural único y forjan el carácter de estas ciudades creativas que se iluminan al ritmo de nuestros pasos.
También explore y descubra las ciudades a través de murales, exposiciones y arte urbano. De camino, pare a probar algo en los animados mercados y festivales gourmet. Las creaciones de los audaces chefs harán vibrar su paladar. Si le gusta salir, bailar o moverse, la mesa está puesta día y noche.
¿Cuál es el plan? Caminar por las calles, visitar las boutiques y dejarnos impresionar por el arte urbano, antes de hacer una pausa en un parque o en la mesa de un restaurante local.
Descrita por la UNESCO como una joya del patrimonio mundial, la ciudad de Québec es la cuna de la civilización francesa en América del Norte. Es muy agradable pasear por sus animados y coloridos barrios.
Montreal, una de las ciudades cosmopolitas más festivas, también es una de las ciudades francófonas más grandes del mundo. Nos dejamos sorprender por esta ciudad que nunca duerme. De verdad, ¡aquí siempre hay algo que hacer!
Las ciudades vibran todo el año
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