La riqueza cultural de Québec salta a la vista. Y si somos un poco curiosos, nos invita a sumergirnos en ella. Aquí, la creatividad tiene su espacio. Nuestro espíritu viaja de museos a exposiciones, y de galerías a talleres, para conocer a artistas que nos dan una cálida bienvenida.
¿Busca algo más auténtico? Baile hasta el amanecer, vibre al ritmo de los tambores y saboree las tradiciones autóctonas. Por la noche, las ciudades ponen en relieve una cultura que vive a lo largo de distintas épocas y ofrece la llave a un rico pasado, presente y futuro.
Rica gracias a su pasado autóctono, francés y británico, la cultura quebequense se reinventa y se expresa a través de su arte e historia.
Con sus barrios animados, restaurantes célebres y boutiques locales, el Viejo Québec tiene más de una historia que contar. Las encontramos a la vuelta de cada esquina e incluso a orillas del San Lorenzo.
Para vivir la experiencia de las culturas y tradiciones autóctonas, podemos elegir. ¿El programa? Concursos de danza y tambores tradicionales, platillos gastronómicos, artesanías y juegos infantiles. ¡Las fiestas tradicionales son algo muy serio! Se denominan “pow-wow”.
Cultura e historia todo el año
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