Es el camino más antiguo, que data de la época de la Nueva Francia. Los hombres picaron muchísima piedra a principios del siglo XVIII para crear la primera carretera de más de 280 kilómetros que une a Québec con Montreal. Esta ruta pasa por sitios patrimoniales y atracciones recientes, como viñedos.
Visita la página web oficial para descubrir el recorrido completo de esta ruta turística.
280 kms
La ruta 138 toma en gran parte Chemin du Roy. El circuito parte de Repentigny, al este de Montreal, hacia Québec. Lo podemos recorrer en coche, moto o bicicleta.
Momentos culminantes
Regiones
Arte visual y tradicional y el pan de Rosalie
Comenzamos Chemin du Roy con un centro de arte muy moderno que lleva el nombre de una gran cantante de Québec que se convirtió en pintora. Este lugar de artes visuales y artesanías presenta exposiciones y talleres familiares.
En esta casa construida alrededor de 1790, nos metemos en la vida de una familia en 1822, donde vivía una madre de 11 hijos, fundadora de las Hermanas de la Misericordia. Talleres de arte tradicional, conciertos y una boutique de productos regionales.
De Lanoraie a Berthierville: viñedos y naturaleza
Lanaudière es también una región productora de vino. En Lanoraie, visitamos dos viñedos a unos diez minutos uno del otro: el Lano d'Or, con un restaurante con una terraza al borde del río, y Aux pieds des noyers, también un restaurante.
Estiramos las piernas mientras caminamos por las islas de la SCIRBI, mucho más corto que decir Sociedad para la Conservación, Interpretación e Investigación de Berthier y sus Islas. ¡Los amantes de la ornitología encontrarán aquí su paraíso!
La región de Mauricie en dos paradas
Los quebequenses tienen una relación de amor con la tiendita de su infancia. ¡Había de todo! La tienda Le Brun no es la excepción. Ubicada en edificios de la época, también tiene una bonita cafetería, Chez Eugène, y una sala de espectáculos.
También llamado Molino Señorial de Tonnancour, este sitio histórico destaca uno de los pocos molinos del siglo XVIII que todavía se usan. En verano, las visitas guiadas se realizan con guías vestidos de la época. Además, hay senderos para caminar.
Descubre la historia de Trois-Rivières
Segunda ciudad fundada en la provincia, Trois-Rivières tiene un rico pasado histórico para descubrir a pie en este circuito patrimonial. Por suerte, todavía hay varios edificios del siglo XVIII, a pesar del incendio de 1908 que devastó la ciudad.
El monasterio de las Ursulinas se identifica por su cúpula plateada que domina la zona histórica de Trois-Rivières. Alberga un museo que contiene más de 300 años de historia y cuenta la vida de las monjas que fundaron escuelas y hospitales allí.
Patrimonio arquitectónico de Trois-Rivières
La mansión más antigua de Trois-Rivières es una de las joyas patrimoniales de Québec. Su historia refleja la vida burguesa en la Nueva Francia y su arquitectura. Además de las visitas guiadas, hay lectura de cuentos, conferencias y talleres.
Esta residencia del siglo XVIII, una de las más antiguas de Trois-Rivières, se encuentra cerca del santuario de Notre-Dame-du-Cap. La visita a la Casa Rocheleau se acompaña de un programa cultural, con talleres y animaciones históricas.
Un molino, pero antes que nada, un presbiterio
Este antiguo presbiterio, sitio patrimonial, da a conocer su historia de manera original. La visita guiada Sacré Curé! está animada por personajes disfrazados que cuentan anécdotas con mucho sabor. También hay un huerto de hortalizas y senderos.
La arquitectura del molino de la Chevrotière evoca sus orígenes franceses. Este sitio histórico que data de 1802, ahora alberga una exposición permanente sobre los oficios tradicionales, así como exposiciones temporales de arte visual.
Cerveza o té del labrador e historia de los Jesuitas
Este es el lugar para tomar una copa y un bocadillo en Neuville. Esta cervecería artesanal tipo pub ofrece una paleta de degustación de sus cervezas con diversas influencias; ¡Incluso hay una inspirada en las pálidas australianas!
Al comienzo de la Nueva Francia, los padres Jesuitas establecieron allí su misión, en Québec. La Casa exhibe artefactos de su presencia y explora el impacto de la llegada de los europeos a las comunidades indígenas. ¡Súper interesante!
